Llegará un día que sea el último.

Tengo que mantener la calma como sea. El mundo se acaba. Pero antes de que se acabe yo viviré. Puedo mantener la calma a pesar de las conspiraciones en mi contra. Se que aunque ciertas personas hacen lo posible para perjudicarme, aún hay esa posibilidad de que se les acabe el mundo antes que a mi. Y si mantengo mi esperanza fija en esa idea, me puede ayudar perfectamente bien para mantener mi calma ante las ofensivas. Algún día yo seré libre para no tener que soportar sus conspiraciones. No perderé mi calma, no malgastaré mi tiempo atendiendo a la gente perjudicial mas de lo que se merecen.
Paciencia. A veces pierdo la paciencia y me gustaría que ese día llegara ya. Y se me despierta una especie de instinto que les mataría al instante. Y ese instinto es y significa haber perdido la calma.
Quiero que desaparezcan del mundo antes que yo. Pero he de esperar a que el mundo acabe a su ritmo. Y mientras poder sonreír y hacer las cosas que tengo que hacer.
Y el mundo va terminando, poco a poco, y llegará el día final.